EL MANIFIESTO COMUNISTA.
1. Un fantasma recorre Europa, el fantasma del comunismo, contra este fantasma se
han coaligado en santa jauría todos los poderes de la vieja Europa, el Papa y el Zar,
Metternich y Guizot, los radicales franceses y los policías alemanes.
¿Dónde hay hoy un partido de la oposición a quien sus adversarios en el gobierno no
le lancen la infamante acusación de comunista?
Y ¿dónde hay un partido de oposición que no fulmine con este reproche oprobioso
tanto a los oponentes más avanzados como a sus adversarios de la reacción? De este
hecho se desprenden dos consecuencias:
Que el comunismo es ya reconocido como un poder por todos los poderes europeos.
Que ya ha llegado el momento de que los comunistas expongan públicamente y ante
el mundo entero sus concepciones, objetivos y tendencias y salgan al paso de las
fábulas en torno al fantasma del comunismo con un manifiesto de su propio partido.
Con este propósito se han reunido en Londres comunistas de las más diversas
nacionalidades y han redactado este manifiesto que se publicará en las lenguas
inglesa, francesa, alemana, italiana, flamenca y danesa.
BURGUESES Y PROLETARIOS
1. La historia de todas las sociedades humanas habidas hasta hoy ha sido la historia
de la lucha de clases. Hombre libre y esclavo, patricio y plebeyo, barón y siervo de la
gleba, maestro y oficial del gremio, en una palabra, opresores y oprimidos se
enfrentaron en perpetuo antagonismo, librando una lucha incesante, a veces
encubierta y a veces franca, lucha que se saldó en cada caso con una transformación
revolucionaria de toda la sociedad o bien con el hundimiento conjunto de las clases
enfrentadas.
En épocas anteriores de la historia hallamos en casi todas partes una completa
articulación orgánica de la sociedad en diversos estamentos, una variada gradación
jerárquica de las posiciones sociales. En la antigua Roma hallamos a los patricios, los
caballeros, los plebeyos y los esclavos. En la Edad Media a los señores feudales, a los
vasallos, a los maestros y oficiales gremiales y a los siervos de la gleba, aparte de que
casi todas estas clases tienen su propia jerarquía interna.
La moderna sociedad burguesa, surgida de las ruinas de la sociedad feudal, no ha
suprimido los antagonismos de clase. Lo único que ha hecho es establecer nuevas
clases, nuevas condiciones de opresión y nuevas formas de lucha en substitución de
las anteriores.
Nuestra época, la época de la burguesía, se caracteriza, sin embargo, por el hecho de
haber simplificado estos antagonismos de clase. Paso a paso, el conjunto de la
sociedad se va escindiendo en dos grandes campos enemigos, en dos grandes clases
directamente enfrentadas: la burguesía y el proletariado.
DESDE ESTA DIRECCIÓN PUEDEN TENER EL TEXTO COMPLETO:
http://www.claseshistoria.com/general/pdf/manifiestocomunista.pdf
Este es el espacio virtual de la asignatura Sociología con el sólo fin de registrar los distintos textos que a lo largo de la cursada se trabajen. No se atenderán consultas por este medio.